El Símbolo - Su significado
Hablamos sistemáticamente del Símbolo o del Simbolismo. Infinidad de hermanos escriben interesantes interpretaciones y consignan sus experiencias en el ejercicio de esta metodologia de enseñanza masónica. Sin embargo, resulta importante que Aprendices y Compañeros puedan acceder a definiciones que los ilustren y les permitan comprender el significado de aquello que será fundamental para ellos.
Nuestro propósito es proceder a difundir lo que entendemos es no solo accesible y comprensible, sino que conlleva antecedentes que complementan el estudio y comprensión del simbolismo y las historias y leyendas que existen tras él.
El símbolo se define como un signo visible, mediante el que se representa un sentimiento espiritual, una emoción o una idea. Tal es la razón por la que, ---tomándolo tan solo como ejemplo- los cristianos primitivos les dieron el nombre de Sitabolos a todos los Ritos, ceremonias y formas externas que contenían un significado religioso, tales como la Cruz y otras reproducciones e imágenes y aún los Sacramentos y elementos Sacramentales.
Mucho antes, los egipcios transmitían el conocimiento de su filosofía esotérica en símbolos místicos. En general, todas las primitivas civilizaciones usaron los símbolos. "La primera enseñanza de la palabra...” sostuvo Stukey, "Consistia principalmente en sitabolos. La sabiduría de los caldeos, fenicios, sirios, egipcios, judíos, de Zoroastro, Sanchoniathon, Pherecydes, Platón, y todos los antiguos de quienes hemos tenido conocimiento, es simbólica.” Y el sabio Faver advierte que: "La alegoría y la personificación, fueron convenientes al genio de la antiguedad y la sencillez de la verdad fué contínuamente sacrificada en el templo de la decoración poética."
Debemos mencionar que la palabra "Símbolo", proviene de un verbo griego, que significa "para comparar una cosa con otra" y de aquí que símbolo y emblema son dos palabras que muy frecuentemente se usan como sinónimos en Masonería.
Símbolo en Masonería constituye la expresión de una idea que está derivada de la comparación o contraste de algún objeto, con una concepción moral o atributo. Así, la plomada se define como símbolo de rectitud; el nivel, de igualdad; o la colmena, como industria. Las cualidades físicas de la plomada se comparan con la concepción moral de la virtud o rectitud de la conducta. Por ello, la plomada se enquista en el Masón, después de que él comprende su significado simbólico, porque en lo sucesivo será la idea visible de rectitud o integridad de la conducta.
Relacionarse con los símbolos en nuestra Orden, es la razón de es la razón para estudiarlos y completar la comprensión de estos objetos visibles y sacar de ellos las ideas morales que expresan.
Sostiene Mackey que “el carácter objetivo de un símbolo que representa algo material a la vista y al tacto, como representación de una cosa íntima, es más comprensible para la mente infantil, ya sea que la infancia de la mente, se considere nacional o individualmente. Y de aquí que en las primeras edades del mundo, en su infancia, todas las proposiciones teológicas, políticas o científicas, fueron expresadas en forma de símbolos".
Las primeras religiones fueron eminentemente simbólicas, como nos lo ha dicho ese gran historiador y filósofo Grote: "En un tiempo, cuando el lenguaje estaba aún en su infancia, los símbolos visibles eran los más vívidos de impresionar las mentes de los auditorios ignorantes."
Nadie tiene dudas hoy, madurada la inteligencia del hombre, que cada letra del alfabeto, es el símbolo de cierto sonido. Al intruir a los niños en la forma y valor de las letras, nosotros describimos algún objeto familiar que grafica la letra, cuya representación ayudará a la memoria infantil. Por eso, cuando el maestro dice "A. es un alumno", el alumno será un sitabolo de la letra A.
El Dr. Barlow en su Essays on Symbolism I., p. 1, sostenía que las "Representaciones simbólicas de las cosas Sagradas". También dijo que “.....Coebo, con un sistema de doctrina religioso, apeló al sentido y ha hecho llegar hasta nosotros la historia monumental de la edad temprana."
Es interesante consignar además, las siguientes referencias que son por demás ilustrativas. Dijo que: "Las tumbas egipcias y los montantes contienen símbolos religiosos, aun en uso entre los Cristianos. Formas similares, con su correspondiente significado, aunque bajo diferentes nombres, se encuentran ante los hindúes y se pueden ver en los monumentos asirios, etanatos y griegos.”
"Los hebreos adquirieron muchos de estos primitivos símbolos religiosos de los egipcios y más tarde de los babilonios y por medio de ellos entre simbolismo imaginario ambos, verbal y objetivo, ha llegado hasta nosotros.”
Los Sacerdotes egipcios, eran más versados en el simbolismo, así como los ealdeos, y asi fueron Moisés y los profetas y por lo general los doc-tores judíos. Y así eran muchos de los sacerdotes de la iglesia, en especial los sacerdotes griegos”.
"Philo, de Alexandría, era muy versado en simbolismo y el evangelista San Juan, ha hecho mucho uso de él”.
"Los primitivos arquitectos Cristianos, escultores y pintores, asimilaron grandes conocimientos simbólicos y los reprodujeron en sus trabajos."
Uno de los historiaodres masónicos de relevancia, como lo fue Squier, sostuvo en su Serpent Simbolism in America (p. 19) una idea similar del antiguo uso del símbolo. Dijo esta inquietante proposición: "....En ausencia de un lenguaje escrito o forma de expresión capaces de transportar ideas abstractas, nosotros inmediatamente comprendemos la necesidad de los pueblos primitivos de un sistema simbólico. Ese simbolismo resultó en gran parte de esta necesidad; y de que unido a los primitivos sistemas religiosos del hombre, se siguió usando más tarde cuando en las etapas más avanzadas del pensamiento humano, esa previa necesidad no existía ya. Por consiguiente vino a ser una especie de lenguaje sagrado que cobró una significación secreta que solo entendían unos cuantos."
Pero tales conceptos fueron luego complementados por el mismo autor, el que nos legó su pensamiento a fin de que en el transcurso del tiempo, poudiésemos comprender la mística definitoria de nuestros antiguos maestros: "En la francmasonería, todas las instrucciones de sus misterios se comunican en forma de símbolos. Fundados en una ciencia especulativa, en un arte práctico, han tomado la herramienta de la profesión, que ha espiritualizado los términos àe arquitectura del templo de Salomón y todo lo relacionado con esta historia tradicional y los ha adoptado como símbolos; han enseñado su profunda moral y sus enseñanzas filosóficas por este sistema simbólico. Pero estos sistemas no se limitan a los objetos materiales como los jeroglificos de los egipcios. Su historia y sus leyendas son en su mayor parte simbólicas. Muchas veces cuando una leyenda está desautorizada por la historia, tergiversada por los anacronismos, es probablemente absurda en sus pretensiones si se le ve desde un punto de vista puramente narrativo o basada en un hecho plenamente histórico; pero si en cambio se le estudia como un símbolo, vemos que tiende a impresionar la mente con una gran verdad moral o filosófica. Las leyendas masónicas son parâbolas y una parábola es simplemente un símbolo hablado. Pero su decisión, dice Adam Clarcke, "las cosas espirituales se entienden mejor y hacen una impresión más profunda en las inteligencias escrupulosas."