DECÁLOGO MASÓNICO
Ama a todo lo que existe, porque todo es vida.
Afina tu oído para poder escuchar la tenue voz de tu alma; el ella hay sabiduría.
Escucha atentamente y responde lentamente; una respuesta apresurada te puede conducir al error.
Bebe de la fuente de la vida; solo allí hay agua fresca para saciar tu sed.
Usa tus manos para trabajar, dar y acariciar; la mano que golpea se duele a si misma.
Piensa, no repitas lo que otros ya han pesado.
Permite que tu imaginación vuele tan alto como los cóndores; si vuela bajo como los mosquitos, herirás y te herirás a ti mismo.
Pule tu piedra con esmero, pero también con amor; la autocrítica mordaz desanima y deprime.
Alza tu vista para contemplar el cielo, pero bájala también para servir a los necesitados que están cerca y lejos.
Busca al diamante que está dentro de ti; el que esté fuera, solo será un mero espejismo.
Violeta P. Cappella de Aguerre .·.